Si me preguntaran una sola razón para visitar Arequipa en un viaje a Perú. Respondería, sin dudas, por el Convento de Santa Catalina.
Aunque, visitar iglesias no es una de mis actividades favoritas cuando estoy de viaje. El Convento de Santa Catalina no es un edificio cualquiera, es una ciudadela de más de 20 mil metros cuadrados que te transportará a una ciudad del sur de España. Es un viaje dentro de un viaje.
El Convento de Santa Catalina se encuentra en la calle Santa Catalina 301, a una cuadra de la Catedral de Arequipa, en pleno centro de la ciudad. El precio de la entrada es de 40 soles. 20 soles con tu carnet de estudiante extranjero (solo para menores de 21 años). Los niños menores de 7 años entran gratis.
El Convento de Santa Catalina fue fundado en 1580 por una rica aristócrata María de Guzmán.
Pensado para acoger las hijas de las familias más adinerados de la ciudad, el convento fue construido en consecuencia. Muchas de las habitaciones del convento contaban con más lujos de la vida terrena que de la sobriedad del alma de una monja.
Cada una contaba con su propia cocina, baño, comedor y espacio de oración. Además, tenían derecho a contar con personal de servicio y esclavos.
En la época colonial se acostumbraba a otorgar un rol a las hijas de la familia: la primera debía casarse, la segunda debía dedicarse a la iglesia y la tercera sería la encargada de cuidar a los padres.
Sin embargo, muchas de las mujeres que entraban al convento lo hacían solo de manera temporal. Puesto que ser instruido en un convento o monasterio era visto como un símbolo de estatus.
Con un estilo claramente colonial pero de naturaleza mestiza, esta obra arquitectónica tiene una mezcla entre los elementos españoles típicos de la época y aquellos elementos que son autóctonos del lugar, siendo este el único en su clase en Latinoamérica en contar con esta fusión de culturas en una misma edificación.
El Convento de Santa Catalina recuerda muchas de las ciudades del sur de España, con sus pequeñas callejuelas, muros blancos, plazas y fuentes.
Incluso, muchas de sus calles internas llevan nombres de ciudades como Sevilla, Málaga, Granada o Córdoba.
Para su visita, el Convento de Santa Catalina cuenta con dos horarios dependiendo de la temporada ; si estamos en temporada alta, al cual va desde los meses de Mayo a Diciembre se encuentra disponible de 8:00 am hasta las 5:00 pm. Y si es temporada baja que va desde Enero hasta Abril, se encuentra abierto desde las 9:00 am hasta las 5:00 pm.
También cuenta con un horario nocturno de martes y jueves. Según muchos es ideal para aquellos que quieran ver su lado tétrico o bien su lado místico. Alrededor del convento se han tejido muchas historias de fantasmas, si quieres agregar un poco de emoción a tu visita, el horario nocturno es para ti.