La Mer de Glace (o Mar de Hielo) es el glaciar más grande de Francia y un símbolo de los Alpes, se extiende por 40 kilómetros y tiene 7 kilómetros de largo. Es un destino fascinante, por esta razón no quise perder la oportunidad de visitarlo en mi viaje a los Alpes Franceses.
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Para visitar el Mar de Hielo se debe tomar el tren de Montenvers, el mismo tiene un costo de 29,5 euros (ida y vuelta), es un poco caro pero vale la pena cada céntimo. El mismo boleto sirve para usar el teleférico que desciende hasta las grutas de la Mer de Glace.
El tren asciende hasta los 1900 metros en 20 minutos, a esta altura la temperatura baja a unos –15 grados, bastante frío, aún para lo que habíamos vivido esos días en los Alpes. Desde el sitio de Montenvers se puede disfrutar ya de la majestuosidad del glaciar. Además junto enfrente se encuentra uno de los picos más importantes de la zona, el del Grand Dru.
Para visitar las grutas e internarnos en las entrañas del Mar de Hielo aún debemos tomar un teleférico, hasta hace unas décadas bastaba salir del teleférico para poder acceder a las cuevas, sin embargo el cambio climático ha hecho retroceder el glaciar hasta tal punto que hoy hay que bajar unos 15 minutos por escaleras.
Se estima que el glaciar ha retrocedido unos 120 metros en los últimos 100 años, a lo largo del recorrido de las escaleras se pueden ver las placas que marcan el nivel del glaciar, es impresionante la velocidad a la que retrocede. En el camino de bajada también es posible escuchar las historias de abuelos y padres que recuerdan cómo era hace sólo unos años…
Escaleras que llevan al Mar de Hielo
Las grutas del Mar de Hielo
Las grottes de la Mer de Glace son el principal atractivo del lugar y es que si ya es impresionante poder deleitarse con la inmensidad del glaciar y los picos que lo rodean, aún más es poder aventurarte por las entrañas de este mar de hielo.
Las grutas han sido talladas en el glaciar desde el año de 1946, el recorrido es corto pero bastante entretenido e insólito. Al interior se puede ver un pequeño museo de los utensilios usados a lo largo de la historia para crear las grutas, además de varias esculturas en hielo.
Caminando por las grutas no pude evitar sentirme como el coronel Aureliano el día que su papá lo llevo a conocer el hielo.
Consejos para visitar el Mar de Hielo de Chamonix-Mont-Blanc
- Es importante informarse sobre el riesgo de avalanchas antes de ir a visitar el Mar de Hielo, ya que este es cerrado ante cualquier alerta. El día anterior a nuestra visita hubo mucha gente que se quedó sin verlo por una de estas alertas.
- El tren de Montenvers sale cada 30 minutos. Es recomendable hacer la visita al medio día, el recorrido completo toma unas tres horas sin prisas.
- También vale la pena visitar Chamonix-Mont-Blanc, en el pueblo podrás encontrar restaurantes donde degustar la comida savoyarde e ir de shopping en una de sus muchas tiendas.
- Si estás en busca de experiencias extremas, entonces te recomiendo que tomes el teleférico a la Aiguille du Midi, ahí podrás visitar el mirador de vértigo de los Alpes, una caja de cristal suspendida a más de mil metros de altura y de frente al techo de Europa, el Mont Blanc.