El siguiente es un post invitado de Off2Colombia.com.co, una guía de viajes por Colombia escrita por dos franceses y toda una comunidad de colombianos y extranjeros que desean mostrar los destinos más impresionantes de Colombia. Hoy nos llevan a Taganga y Parque Tayrona en la costa Caribe del país.
Taganga y Tayrona son unos de los destinos más populares en Colombia, especialmente para los mochileros. En ambos lugares se encontrará con aventureros en búsqueda de arena, sol, buceo, naturaleza, tranquilidad y, en el caso de Taganga, noches de fiesta interminables.
Si cree que no tiene mucho tiempo para aprovechar su visita, no se preocupe; aquí le presentamos opciones de cómo disfrutar de este paraíso en tan solo cuatro días.
Día 1: Descubriendo Taganga
Comenzamos en Taganga, donde encontrará muy buenas opciones de hospedaje como Masía, Hotel Divanga y la Casa de Felipe. Los dos primeros son nuevos así que están muy bien equipados, tienen piscina y, lo mejor de todo, en un ambiente relajado y silencioso. Esto será muy importante cuando se dé cuenta de que la fiesta puede seguir sin parar ya que, aunque los bares cierran a la 1:30am, siempre se encuentra un lugar donde continuar hasta el amanecer.
La Casa de Felipe es uno de los hospedajes favoritos en Taganga. Las principales razones son su ubicación, frente a la playa, y la deliciosa comida que preparan (saborear su filet mignon luego de la caminata por la Ciudad Perdida es una experiencia inigualable). Además, es un buen lugar para conocer gente y pasar el día tranquilo.
Luego de haber escogido su alojamiento, lo primero que debe hacer es visitar las agencias de buceo. Aquí se encuentran muy buenas opciones y escenarios marítimos impresionantes gracias a la diversidad de fauna. Lo mejor de todo es que los precios son asequibles, sobre todo para principiantes, así que asegúrese de aprovechar esta ocasión para comenzar su carrera de buzo.
Para el momento que haya tomado su decisión deberá tener bastante hambre, así que lo mejor es aprovechar el resto del día para visitar Santa Marta y probar su deliciosa gastronomía. El plato típico de la zona es el arroz con coco y pescado frito, así que pregunte cual es el mejor lugar para encontrarlo y de seguro compartirá una buena comida con los samarios. Antes de volver de Santa Marta a Taganga (le recomendamos hacerlo en taxi), puede disfrutar la brisa fresca del atardecer en alguno de los bares de la plaza, acompañado de unas bebidas.
Una vez en el pueblo, si le queda energía para terminar el día al estilo mochilero, visite una de las tiendas que se encuentran frente a la costa para tomar unas cervezas y prepararse para la fiesta en algunas de las discotecas. Las principales son Mirador o Sensations y, como lo mencionamos, cierran a la 1:30am, pero la rumba amanece en alguno de los hostales cercanos.
Día 2: De relax en Playa Blanca
¿Cansado de tanta actividad el primer día? Probablemente quiera dormir hasta tarde, pero es eso o perderse unas increíbles horas bajo el agua mientras practica lo aprendido en sus clases de buceo. Si le sobran energías, puede caminar hasta Playa Blanca, escalando las colinas que rodean Taganga.
Aquí encontrará una oferta increíble de frutas y restaurantes de mariscos, así que puede reponer su energía y refrescarse con uno de esos jugosísimos jugos (si, es redundante pero describe muy bien la experiencia), mientras descansa en la playa. Seguramente, no tendrá ningún problema en quedarse en disfrutar de esta calma por unas horas…
Para cerrar el día con ‘broche de oro’, una gran idea es recibir los últimos rayos del sol en la plaza principal de Taganga, cerveza en mano, admirando los intensos colores del atardecer caribeño.
Día 3: A disfrutar del Parque Tayrona
Este es el día en que visitará el Parque Nacional Tayrona, así que despiértese lo más temprano que pueda y tome un taxi hasta la entrada del Parque que le costará unos 50.000 pesos. Una vez allí, tendrá que seguir su camino a pie o en burro, aunque la caminata no es recomendable en época de lluvia.
El costo de la entrada al Parque Tayrona es de 35.000 pesos por persona, que podrá parecerle caro pero no se desanime, realmente lo vale. Allí tendrá que buscar dónde dormir y, aunque las ofertas son bastante básicas, no necesita más que pagar 15.000 pesos por noche para dormir en hamaca en Arrecifes o, si lleva carpa, el mismo precio para instalarla en las zonas permitidas.
Si escoge la primera opción, puede pasar su primer día descansando en La Piscinita o paseando en las playas de su hermana mayor, La Piscina. En la noche puede visitar el restaurante que queda cerca a la zona de camping para disfrutar de una buen cena; un poco cara pero deliciosa.
Día 4: Playas y culturas indígenas
Intente dejar el Parque lo más tarde que pueda o, si es posible, la mañana del día siguiente; así tendrá más tiempo para maravillarse en el lugar. Este día le sugerimos realizar la caminata a El Cabo, una playa impresionante visitada por la mayoría de mochileros. Este sitio es también el punto de partida para la caminata a El Pueblito Chairama, un recorrido no muy largo y bastante fácil.
Al llegar a su destino se encontrará con un pequeño asentamiento arqueológico indígena, muy apropiado para conocer más sobre la historia de la región. Además, otra gran recompense al llegar son las increíbles vistas durante todo el paseo, así que no olvide su cámara.
Después, puede relajarse y compartir experiencias con otros viajeros en El Cabo, o seguir explorando nuevas playas (incluyendo la playa nudista que queda bastante cerca). Nunca le faltará la oportunidad de hidratarse con deliciosos jugos de frutas exóticas, o de maravillarse con la fauna marina haciendo snorkelling.
Como podrá ver, en cuatro día puede hacer casi lo que quiera en este pequeño paraíso; solo déjese llevar por la tranquilidad del lugar, disfrute de la calidad de su gente y olvídese de su vida en la ciudad.